jueves, 11 de septiembre de 2014



 LA DERROTA DE LOS TIEMPOS

 Cuando caiga la noche seguiremos juntándonos alrededor del fuego, pero como los viejos, para recordar, no para bailar. Reunidos para revivir lo muerto, ese consuelo de final de ciclo. Nadie podrá extinguir la llama de la mejor generación del deporte español. Proyectadas en las tinieblas, sombras de un oro mundial, de dos platas olímpicas, de títulos europeos, en una racha que ya había colocado a España fuera del tiempo, a salvo de las contingencias pero pendiente de la culminación, que se servía en casa, en una Copa del Mundo con un formato a la medida para una final ante Estados Unidos. Pero España, la del oro de todos los tiempos en Japón, ocho años atrás, firmó la derrota de todos los tiempos en el maldito Palacio de los Deportes, que no asistirá a la coronación prevista